Este jueves el grupo de gobierno de Tacoronte eleva a Pleno un Reglamento Orgánico de nuestro Ayuntamiento.
Será la norma por la cual regular su propio gobierno, estructura administrativa y cumplimiento de funciones, y así nuestros representantes públicos en el Pleno, los elegidos por la ciudadanía en las urnas, podrán tener voz y voto en asuntos de nuestra incumbencia. Cuándo y cómo tomar la palabra, cuanto tiempo, qué cosa pueden aportar los concejales y concejalas quedará reglamentado de modo interno.
Hemos de estar muy atentos a este reglamento y a quienes votan a favor o en contra, dando así margen a que sea mas participativo y trabajado, y a que favorezca la flexibilidad y la igualad en la participación política de este municipio, porque hoy un partido puede terne 6 concejalías y otro año una sola.
Esta norma interna se basa en la Ley Canaria de Municipios: Ley 7/2015, de 1 de abril, de los municipios de Canarias https://www.boe.es/buscar/pdf/2015/BOE-A-2015-4620-consolidado.pdf, en ella se establece que cada Ayuntamiento ha de elaborar su propio reglamento de funcionamiento. Ahora bien, si un Alcalde decide pedir a la parte jurídica que lo elabore, y es lo correcto, pero luego no lo lleva a consenso con todas y cada una de las fuerzas políticas que nos representan antes de elevarlo a aprobación inicial, no será un Reglamento ni participativo, ni consensuado ni transparente.
Los concejales y concejalas han podido acceder a él hace apenas una semana y consta de mas de 300 páginas. Después de su aprobación inicial, cosa que deseamos no suceda, pues no ha sido participado por las fuerzas del Pleno, habrá un periodo de alegaciones para su aprobación final, pero ya sabemos bien que esa alegaciones se aceptan o se rechazan y punto. Todo muy regulado, normativo y nada participativo. Por ejemplo Ciudadanos, que cuentan con 5 concejalías puede elevar dos preguntas por concejal, es decir 10, sin embargo PP y los no adscritos solo podrán elevar dos preguntas por pleno.
Lo mismo sucede con los tiempos de uso de palabra, que se reduce mucho según el numero de concejalías de cada partido. La desigualdad que se desprende es flagrante y se coarta claramente a las minorías el derecho de uso de su voz y de representar a la ciudadanía que los ha votado para ello. Cuanto mayor sea el grupo político mas voz y tiempo tendrá, cuanto menor menos visibilidad tendrá. ¿Lo ven ustedes justo? A día de hoy en pleno siglo 21 y con un Reglamento de Participación por fin aprobado, -hace ya dos años y sin desarrollar-, no podemos aun decir «ni mu» desde la ciudadanía organizada a decisiones que luego nos afectan. No hay cauce.
Es en el pleno donde se aprueban o rechazan propuestas que emanan de la ciudadanía y de nuestras necesidades y no es por lo tanto un lugar ni un espacio para coartar libertades ni tiempos. Imaginemos una comunidad donde se apruebe un reglamento que establece cómo funcionar pero que en su elaboración no tenga cabida la aportación de sus miembros, por medio de sus representantes políticos, que van a ser regulados y que no haya por lo tanto lugar para el debate amplio y concienzudo, con el muro de la desilusión y la ausencia de transparencia hemos topado.
Fuente: Facebook Tacoronte Participa (https://www.facebook.com/groups/Tacorontesi/posts/965550697708083/)